Hace un par de meses tuve el honor de acudir a una ponencia de Chris Claremont, el famoso guionista de los X-Men que los llevó al éxito, en el Salón del Cómic de Sevilla. Como todo artista/guionista que aún tiene mucho por aprender, estuve tomando notas todo el rato que estuvimos allí sentados atendiendo al bueno de Claremont, y hoy vengo a hablaros sobre algunas de esas notas.
Claremont comenzó hablando sin que nadie le preguntara, fue un poco raro, nos quedamos un poco contrariados (ni tan siquiera se presentó el hombre), pero lo cierto es que se podían captar algunas ideas muy interesantes. Habló de cómo se crean los personajes en épocas duras en las que no puedes trabajar, de cómo dedicarse a este mundo es una constante lucha contra los lectores con tal de darles exactamente lo que quieren (o lo que no saben que quieren).
- Sobre la inspiración:
"Cada cara que vemos es una inspiración". Fue una de las frases iniciales del discurso de Chris, y menuda frase. Nos contó que muchas de sus ideas venían simplemente de dar un largo paseo, de pasar un rato en la cafetería observando el ambiente, o (cómo no) de los sueños.Sobre esto hemos oído hablar muchas veces. No es que la inspiración sea nuestra única arma, pero sí ayuda mucho para según qué cosas; de modo que debemos saber aprovechar la realidad en la que estamos, saber extraer de ella las cosas que nos interesan y anotarlas en nuestra libreta de mano para que no se nos olviden.
- Sobre los personajes:
En este punto, alguien llegó a preguntarle cómo conseguía que sus personajes hablasen de una forma tan característica, que cada uno tuviera una forma de hablar que no tuviera ningún otro. Él respondió "escucha. Mira a tu alrededor, ¿ves que cada persona habla distinto? ¿Cuántos acentos y cuántas personalidades puede haber sólo aquí, en esta ciudad? Cada uno de tus personajes es una persona, al igual que cada persona es un personaje en potencia". Desde luego son palabras de alguien experimentado, de alguien que ha basado en su vida en hacer personajes, y creo que lleva mucha razón. Nuestros personajes son la base de nuestra historia, y no debemos olvidar eso de cara a nuestros proyectos; sin la base, un edificio no es nada.
